Siempre los/las hubo. Pero en algunos tiempos, los/las extrañamos un poco más. Se trata de los futuros médicos y médicas, en cuya formación profesional se invierte tan poco y tan mal - en general. Las presiones que soportan los estudiantes de Medicina de la UBA han aumentado en años recientes, por varios mecanismos:
1. la inserción del CBC (sobre cuyas ventajas y limitaciones convendría debatir en forma pública, ya que insume un buen porcentaje del presupuesto universitario)
2. el agregado del Internado Anual Rotatorio (IAR), una experiencia pergeñada en forma no-profesional, chapuceramente, sin objetivos, programas, evaluación ni presupuesto por muchos de sus años iniciales,
3. la progresiva acumulación de "elementos curriculares" que no conducen al desarrollo de un pensamiento crítico e independiente, ni entrenan en el análisis riguroso del "océano" de bibliografía biomédica.
4. la "devaluación" y "dilución" de materias troncales (Semiología) como parte de un mecanismo compensatorio por la inclusión de los "elementos curriculares" aludidos en el punto 3.
5. la omisión (será deliberada?) de instancias formativas en bioestadística, epistemología, análisis crítico de ensayos clínicos y de la literatura biomédica, así como la actual orientación de Salud Pública (reflejo de la situación política, orientada a la privatización acrítica y a la promoción del consumo de medicamentos como sustituto del concepto de Salud ligado a condiciones dignas de vida).
6. la completa ausencia de planificación en las actividades pautadas (exámenes, seminarios, trabajos prácticos) para las materias que se cursan simultáneamente según el programa: las superposiciones de fechas de examen están a la orden del día.
Sin embargo, entre los escombros, viene surgiendo una "cosecha" de estudiantes que llenan de orgullo a sus docentes, por su integridad, su dedicación y sus ideales.
Hay una generación (la nuestra) que no logró (no logramos) plasmar una contribución sustantiva a la sociedad, en términos de colaborar en la formación de una sociedad más justa, no-excluyente, orientada a valores y a una integridad fundamental.
Pero los de mi generación no desesperamos: tenemos a la vista una gran esperanza en los jóvenes colegas y en los futuros colegas. No se dejan embaucar por los cantos de sirena de la industria farmacéutica, ni de otros grupos de poder, ni por la cínica política del Estado, que busca el desmantelamiento de la Salud pública desde hace décadas. Se preparan a conciencia, con la mirada en el mejor interés de sus pacientes.
Estos jóvenes son la promesa y el futuro. Y nos ponemos a su disposición, encantados: "en este país, está todo por hacerse".
Cordialmente,
Dr. Pedro Politi
"...porque en nuestra época, Semiología se cursaba el doble de lo que cursan ustedes ahora..." (o similares) fueron las palabras que varios docentes de la Facultad de Medicina de la UBA emplearon para culparnos a nosotros, los estudiantes de algunas UDHs de mi generación, por la pobreza de la educación universitaria que llevamos encima. Sin embargo, no fue un pedido ni una decisión nuestra, los estudiantes, que -por dar sólo un ejemplo- el programa oficial de Medicina en la UBA recorra la Medicina (es decir, Medicina A o Semiología, y Medicina B o Interna) en un año. Mi opinión, compartida por varios de mis compañeros, es que es poco: si bien más largo no necesariamente implica mejor, creo que la semiología se asienta viendo mucho y practicando mucho. Y las cursadas de Interna suelen ir rápido, sin suficiente tiempo para que los conceptos maduren y se afiancen. Retomando la anteúltima oración, nosotros no decidimos eso; fue una decisión de un Decano y un Consejo Directivo integrados por graduados -algunos también docentes- de "la otra" generación. Me cuesta mucho suponer que su objetivo fuera mejorar la calidad académica; más probablemente haya sido "adaptar" la Universidad a las épocas que corrían. Y somos nosotros y quienes se formen detrás de nosotros quienes pagamos y vamos a seguir pagando las consecuencias de esa decisión: cursadas de verano express, escasas horas de trabajos prácticos, prácticos con reducido material o pacientes y numerosos alumnos, maratones por las materias más importantes de la carrera, grandes y severas falencias en la formación de las materias básicas, entre otras.
ResponderEliminarComparto, como se señala en la entrada inicial, la ridícula realidad de que la Facultad no incluye nuestra formación en estadística (o bioestadística), esencial para poder complementar y enriquecer el contenido troncal de cada materia con ensayos y otros trabajos. Si la carrera de Médico Veterinario tiene una materia exclusivamente dedicada a la estadística (http://www.fvet.uba.ar/rectorado/carreras/veteplan.php), ¿por qué la nuestra no?
Para concluir, supongo que las falencias en la educación existen ahora y existieron siempre; con esa (y la misma) educación se han formado médicos, médicos-docentes y médicos-investigadores, algunos buenos y otros malos; algunos dedicados y otros, desinteresados. Si bien la formación general debe ser importantísima, no creo que los estudiantes estemos condenados a ser tan bajos y mediocres como el programa que nos rige, la formación que se nos ofrece, ni las autoridades que nos gobiernan.
Estimado Ignacio: Un poeta latino, llamado Horacio, definió, en el siglo I a al "viejo": "lento, quejoso, alabador de los tiempos en que era niño" (o joven). Lejos de mí intentar esas alabanzas. Quise decir que mi generación y la precedente tienen un grado elevado de responsabilidad por la progresiva erosión de la calidad curricular, por la ceguera ante los cambios y por el nivel inaudito de corrupción reinante.
ResponderEliminarLas jóvenes generaciones representan, para nosotros, toda una gran esperanza. Pero no se vive sólo de esperanzas, y entre todos deberemos apuntalar estos jóvenes brotes.
Saludos,
Pedro
El debate sobre este tema es larguisimo y me limito a algunas criticas/aportes muy puntuales. Voy a ser lo mas directo y concreto posible.
ResponderEliminarMi idea tiene que ver con objetivos bien planteados desde el inicio de la carrera. Yo plantearia un modelo en donde se prioricen las materias finales de la carrera de 4to año en adelante digamos. En concreto, plantearia un cambio radical del ciclo biomedico (del ciclo clinico probablemente tambien, pero empecemos por algun lugar).
-Salud Mental ANUAL me parece una perdida de tiempo VALIOSISIMO. Y no me vengan con que soy partidario del modelo biologicista de la medicina porque todos sabemos que se hace en las cursadas de salud mental. He visto alumnos haciendo trabajos practicos disfrazados de travestis. Si eso es combatir el biologicismo puro---> que se pudra Flanders! Decia Homero Simpson.
-Anatomia me parece una materia troncal de la medicina. Pero la cantidad de informacion inservible que se otorga en las cursadas es de proporciones astronomicas. Se podria hacer una “Anatomia 1” con el objetivo de darle al principiante los conocimientos necesarios para abordar las materias venideras y luego una “Anatomia 2” con un enfoque mucho mas clinico, cosas utiles, APLICADAS. Esa ultima palabra es la clave del “modelo de carrera” que me gustaria. Aplicadas a un paciente, a un sindrome clinico. La respuesta al porque no se hace de esta manera es: que es mas dificil, hay que pensar mas… pero nadie tiene ganas.
-Bioetica UNO y Bioetica DOS… PERDON?... al menos yo no tengo palabras para describir. Eso es combatir el biologicismo puro?.. bahhh
-Salud Publica de la manera en que esta dada no se si suma mucho la verdad. Como bien se explico en la nota, lo que menos se hace es llenar a los alumnos de espiritu critico. En lugar de ello se la pasan horas y horas diciendo cual es la diferencia entre META y OBJETIVO. Hace poco una profesora de esta materia defendia al ministro de salud tucumano… Si si… el mismo ##### que manipulo la estadistica para bajar la tasa de mortalidad---> Pero vos me estas jorobando querida??? Ud, Profesora sabe bien lo que hizo el ministro, ud misma enseña como se calcula la tasa de mortalidad infantil, NO hay manera que se le haya pasado por alto… de nuevo, sin palabras.
-Respecto al CBC tiene cosas a favor y en contra. Al menos a mi, que hice un colegio secundario orientado a la economia, me sirvio porque nunca habia tenido materias como biologia, quimica y biofisica. Tal vez deberian agregar la opcion de rendir un examen directo para aquellos que ya salen preparados con una orientacion en ciencias naturales de su secundario o polimodal o como se llame en la actualidad. Tal vez eso descomprimiria un poco y se ahorraria algo de presupuesto.
-Respecto a materias troncales como
semiologia, son pocas las unidades que aun dictan la materia en forma anual. De las que conozco, la UDH del Htal Roffo y la del Htal Ramos Mejia (al cual asisto). Desde mi punto de vista fue un acierto haberla cursado anual. Lo mismo opino de haber cursado anual otras materias que considero muy importantes y que en la mayoria de los casos se hacen en la mitad del tiempo (Patologia2 y Farmacologia 2). Igualmente no solo es una cuestion de tiempo sino tambien, de calidad.
-Hay mucho para charlar sobre el tema, pero bueno, la discusion recien comienza. Me encantaria saber la opion del Dr Politi acerca del sistema de “materias cortitas” al cual uno se enfrenta hacia el final de la carrera.
Le pido disculpas de antemano al Doctor por si le incomoda mi manera de expresarme, pero hay cosas que son indignantes.
Saludos, Diego.
Hola! Que tal? Cuando leí los comentarios de Pedro y despues los de mis compañeros recordé que si bien muchas de las autoridades trabajan por mantener "el satus quo" en la UBA tambien es necesario que NOSOTROS hagamos una autocrítica a que actitud tomamos sobre los (muchos) problemas que tiene nuestra facultad y el programa educativo al que nos "atenemos o ajustamos"... cuantas quejas se escuchan en los pasillos de bioquimica, patologia 1 y 2, fisiología, etc etc y que hacemos con respecto a eso?... creo que una vez que nos firman la libreta no volvemos mas!!! O alguno puede decir que nunca eligio una catedra solo porque "es mas facil" o "ponen mejores notas"...?
ResponderEliminarLo que intento decir es que con el privilegio de que profesores como el Dr. Politi depositen confianza en nosotros como médicos del futuro, lleva una responsabilidad... y es la de serlo... qué hacemos, qué NO hacemos y qué vamos a hacer para cambiar las cosas (por lo menos las que podamos)... Es una invitacion no?
Saludos!!!
Cintia
Gracias, Cintia y Diego, por sus comentarios y aportes.
ResponderEliminarEn un cierto sentido, la Facultad que imaginamos está muerta. Su defunción es resultado de una prolongada enfermedad: la ambición de poder a cualquier precio. Los hechos de público conocimiento cubren de vergüenza a los diversos estamentos que componen la comunidad de la Facultad (a cada uno lo suyo, comenzando por quienes tienen más responsabilidad y más poder).
Creo que es hora de reconstruir y refundar la Facultad, y de máxima, la UBA. Universidad como comunidad o "colectivo" de quienes buscamos el conocimiento, y acordamos un código de ética, de respeto, de rigor científico, de compromiso y trabajo.
No necesitamos muros ni estatuas, no precisamos papel con membrete ni escritorios. Sin cargos.
El ambiente de la Facultad es irrespirable. Vamos al mundo, que es ancho y ajeno, a construir y (re)construirnos, de cara a los desafíos que nos pide el momento actual, y reclama el futuro. Eso no quita resistir en la Facultad, pero abre una dimensión mucho mayor.
Armar redes, trabajar mancomunadamente, estudiar, aplicar, hacernos cargo de una realidad que duele, en un país empobrecido al que sólo le queda un profundo rencor.
Hay tanta lucha pendiente, hay tanto por hacer...
Saludos,
Pedro
Respetuosamente, estoy en fuerte desacuerdo con algunas cosas que plantea Diego. Sí coincido en que la mayoría, la gran mayoría de las materias está mal dadas; la máxima expresión de esto es la incompatibilidad de los ciclos biomédico y clínico. Pero no creo que por eso haya que "suprimir" todas las materias que no cumplen con el objetivo de formar futuros médicos generalistas y con mentalidad crítica y orientada hacia el paciente. Porque no nos quedaría casi ninguna materia.
ResponderEliminarComparto la idea de que Salud Mental es, la mayoría de las veces, una pérdida de tiempo. Como siempre, no se trata de buscar culpables, pero todos (docentes y alumnos) somos responsables del bajo aprecio que la sociedad de estudiantes de Medicina en general tenemos por esta asignatura. Asignatura que tal vez sea más provechosa enseñando con ganas cómo funciona la mente humana, para poder después entender cómo se enferma (de la misma manera que aprendemos dónde y cómo está formado el hígado, para después entender cómo y por qué se produce la cirrosis). Creo que el concepto de Diego sí nos llevaría a consolidar el modelo biologisista de la Medicina, y no lo comparto.
Como ayudante de Anatomía, puedo hablar de la enseñanza de esa materia en la facu. No sé si la solución es partirla por la mitad ni hacerla más corta; lo que sí sé, lo que pienso, es que en general se enseñan y se preguntan cosas que, si bien forman parte del programa, y de la Anatomía, yo no lo he podido encontrar sentido ni utilidad en los cortos cuatro años que estoy en la facu. Muchas veces se termina evaluando la memoria del estudiante, y no la capacidad de razonar y comprender. Es un terreno peligroso; cada año que pasa le asigno importancia a temas que antes parecían irrelevantes, y considero irrelevantes temas que me parecían fundamentales. De más está decir que mi experiencia es limitada, y me faltan años para poder dar una opinión revolucionaria, pero sí puedo afirmar con seguridad que falta gente experimentada que nos guíe a nosotros, los que tenemos que enseñarles a los alumnos de primer año, en la selección del contenido. Y es así como se originan los baches, especialmente en una facultad que depende en un 90% del trabajo de los auxiliares docentes, buenos y malos.
Muchas gracias por tu aporte, Ignacio, y por defender tus ideas con respeto por los otros.
ResponderEliminarFui ayudante de Anatomía por 8 años, en una Cátedra que considero muy buena. Aún así, todavía no hallé aplicación para la información que recibí (y transmití) sobre las catorce ramas de la arteria maxilar interna ni sobre el cuadrilátero de Velpeau.
Coincido con vos en que, con la perspectiva del tiempo, cosas irrelevantes pasan a ser importantes, y viceversa. Creo también que Diego propone soluciones "quirúrgicas", pero todos comprendemos de qué realidad docente habla y por qué están así las cosas.
Finalmente, que la docencia sea actividad mayormente de docentes que aún no se han graduado (fui uno de ellos por varios años) muestra un desinterés estructural. Que haya docentes que trabajen y no tengan un salario testimonia cuán poco valoramos el tiempo profesional y el tiempo docente. Esto debe cambiar ya mismo.
Repensar "el modelo" que vamos a elegir es muy importante, y me alegra que este comentario brinde pie para un intercambio enriquecedor.
Cordialmente,
Pedro
No por nada dije que el debate recien comenzaba... estos temas suelen ser muy polemicos, asi quedo demostrado en las muchas charlas que hubo en el foro Mancia.
ResponderEliminarRespecto a los nuevos comentarios:
-Si bien mi proposicion parece quirurgica no estoy planteando que la/s materia/s no se den mas sino que asi como va la mano, no sirve. Mi solucion por ende no es "extirparla" sino "hacer un trasplante de organo"... algo que funcione mejor.
-Es por eso mismo que me "ataje" varias veces diciendo "que eso no es combatir el modelo biologicista". Creo que asi como estan planteadas las materias no biologicas de esta facultad lo unico que hacen es ocupar tiempo.
Creo que jamas se podria lograr que un medico entienda cual es el valor de lo no biologico leyendo un apuntacho sobre las reglas y ppios bioeticos. Creo que esas cosas se aprenden con el paciente al lado (y el profesor directamente).
En pocas palabras seria... introducir materias a la carrera que no hablen de celulas/moleculas/huesos o musculos no necesariamente es la solucion para combatir el "modelo medico hegemonico".
-Respecto a la "asignacion de importancia a los temas" coincido en que puede variar. Y si bien eso es cierto, hay cosas importantes que son y seran siempre de mayor jerarquia. Aquellos ayudantes que aun estan en años bajos de la carrera aun no lo saben. Y no se puede ni enseñar ni hacer hincapie en cosas que se desconoce. En lugar de eso pasan cosas como la siguiente: Una de las tres catedras de anatomia hace hincapie en que los chicos aprendan los nombres de los musculos en latin. Reto a quien sea a que explique una manera de que eso pase a ser relevante en algun momento de la carrera. Al menos que los enseñen en ingles diria yo... tal vez tendria mas utilidad.
Ejemplos hay muchos y Anatomia es solo la punta del iceberg.
-Siempre me pregunte si hubo alguna vez una materia de enfermeria basica y otra materia de urgencias frecuentes que pueden surgirle a cualquier medico. No me parecen temas banales como para dejarlos excluidos de las asignaturas.
Hay mucho para hablar pero lo iremos soltando a medida que se de la conversacion. Es muy interesante el tema.
PD: los acentos se los debo, mi teclado esta en ingles y escribo mucho mas rapido de esta manera!
En latín, Diego? Pero... qué sería, el latissimus dorsi?
ResponderEliminarHay muchos puntos valiosos en tu aporte.
Creo que todos comprendemos que no es que querés remover materias, sino cambiar la docencia.
Se hace imprescindible una discusión amplia sobre cuál será "el modelo" de médico a formar.
Saludos,
Pedro
Hola. Quiero ser sintético.
ResponderEliminarClaramente, a mi modo de ver las cosas, el problema básico es la asimetría. Asimetría entre recursos y beneficiarios de los mismos dentro de la Facultad.
Ejemplo: En una mesa de Anatomía -año 2009- hay de 10 a 15 alumnos, muchas veces, sin ayudante, con 1, 2 o 0 preparados para toda la mesa. Es un trabajo práctico, ¿no?
En los alrededores proliferan los institutos privados donde los alumnos que pueden "le meten los cuernos a la Facultad", no sólo haciendo cursos paralelos de Anatomía, sino de todas y cada una de las materias biológicas del Ciclo Biomédico. ¿Qué es lo que desde dentro de la Facultad falla para que esto ocurra? En principio, oferta horaria, teóricos en sincronía con los temas dados en la semana, la posibilidad de experimentar para aprender (disecar en anato, colorear y preparar en histo, hacer GRAM en micro), docentes con pocos alumnos a cargo, unificación de criterios al enseñar y evaluar y mil cosas más que hacen a una enseñanza basada en proporciones correctas.
Yo no creo que lo pasado fue mejor. Sin dudas, es distinto, pero también, hay una sensación de orfandad educacional, donde muchas veces se aprende en forma autodidacta, sin ayuda ni herramientas que le permitan a uno multiplicar los beneficios obtenidos, para un mejor desarrollo de la futura profesión.
Desde mi humilde lugar trato de hacer lo mejor para obtener buenos resultados, absorber lo que sirve y, desechar o postergar lo que no está brindando utilidad, tratando que mis alumnos se lleven cosas importantes. Por ahora, sin menoscabar mi esfuerzo ni el de nadie con alumnos a cargo, esto es sólo "tratamiento sintómatico". La cura debe provenir de cambios radicales, sobre los que nosotros, estando desunidos, sólo podríamos ser hormigas gritando a elefantes.
Va a ser bueno comenzar a debatir acerca de modelos pero también hay una cuestión numérica de recursos/alumnos que requiere un análisis profundo.
Abrazo,
Julio.